martes, 19 de mayo de 2009

¿COHESIÓN SOCIAL O COERSIÓN SOCIAL?

Guatemaltecos: ¡Tenemos Poder! El mismo consiste en nuestra voluntad, en nuestra espontaneidad en exigir justicia, en exigir inmediatamente la separación de los cargos de poder de los implicados por el abogado Rodrigo Rosenberg, así como del parcializado Fiscal General y Jefe del Ministerio Público, por su tenebrosa reunión a solas con el Presidente Colom, después de saberse de la denuncia post mortem, y del Superintendente de Bancos que, lejos de supervisar las operaciones bancarias, se ha dedicado a hacer de inquisidor de quienes expresan una idea, demostrando que le es y será eternamente agradecido a Álvaro Colom por haberlo nombrado en ese puesto.

El lado del Gobierno de la República (y no de Álvaro Colom, como dice la propaganda) está condenado y tiene los días contados. No pueden dedicarse a acarrear miles de personas cada fin de semana, gastándose, según conocedores, entre Q.17.0 millones y US$.3.0 millones entre transporte, alimentación, equipo y "viáticos", mientras que quienes exigimos la separación de todas estas personas de su función pública, sí estamos dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias por exigir justicia y por garantizar que la sangre de los señores Musa y de Rosenberg no cayeron en vano. Eso nos cuesta algún esfuerzo personal, pero lo vamos a hacer porque ya nos cansamos.

Las actitudes del Gobierno de la República, aunque la propaganda diga una cosa, no fomentan la cohesión social. La crisis del país y la actitud de quienes nos gobiernan, lejos de cohesionar a la sociedad, lo que han ocasionado en el tejido social es gran división, y es hasta peligroso que traten de escudarse de tanto latrocinio, decidia y ahora, del "Legado Rosenberg", en una supuesta división entre ricos y pobres. Es más, son los más pobres quienes saldrán más golpeados si, a la larga, el Presidente de la República se empecina en no abandonar el cargo para garantizar una investigación independiente, dado que ya demostró que todo lo manipula a través de SU Fiscal General y SU Superintendente de Bancos.

Asevero que son los más pobres quienes sufrirán más con una prolongación de la crisis, porque para que haya puestos de trabajo, no digamos nuevos empleos, sino que se mantengan los que hay, el país necesita inversión, y la misma no llega donde no hay estabilidad. Luego, mal defiende la opción de los más pobres un gobierno que desestabiliza, que amenaza constantemente con subir impuestos, que da palos de ciego como con el tema de los chalecos para los motoristas, en donde tan solo ponerse de acuerdo en el color les costó mes y medio de idas y venidas, y que, al final de cuentas, no sólo no hace nada por resolver el tema de la seguridad, ahuyentando más la inversión, sino que el presupuesto asignado para este tema, con la venia de la oposición, se lo "pasaron" a los programas populares que, por alguna razón, llaman de cohesión social, aunque en este país sea lo contrario.

Entonces, ¿qué se da en Guatemala? ¿Cohesión social o coersión social?

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